Se me ha presentado la oportunidad de cambiarle de disco duro a una máquina de trabajo, concretamente a un Panasonic Toughbook CF-19, y quería mostraros la manera de hacerlo.
Como es un trabajo que he echo en plan a ratos y durante el proceso he tenido que dedicarme a otras labores, no he podido tomar pantallazos que digamos, que ayudarían si cabe a ilustrar mejor esta entrada, así que trataré de hacerlo por escrito de la mejor manera posible y sin dejarme nada por el camino.
El CF-19 es un portátil que solo tiene una ranura para disco duro y dos USB 2.0, así que en base a eso diré las cosas que he empleado para poder hacerlo y que muy probablemente necesitéis para hacerlo. Hardware he empleado 2 pendrive USB 2.0 de unos 8 Gb, un cable Usb a Mini USB y una caja adaptadora externa donde introducir el SSD que recibirá los datos. Si echáis un vistazo al video de más abajo veréis la caja que emplee:
Del lado del software, emplee la edición gratuita de HDClone 8, Lubuntu 18 (y más concretamente Gparted), y Universal USB installer (aunque prefiero Yumi). Todos ellos son totalmente gratuitos y fáciles de encontrar, y emplearlos no tienen demasiado misterio si se siguen los pasos que van saliendo. En mi caso uno de los pendrives lo tengo de multi boot con Windows 8 y Lubuntu, así que quizás podríais aprovechar para crearos uno y tenerlo siempre a mano, recomiendo Yumi.
Bien, lo difícil de este caso es que el disco duro de destino era más peque y para «colmo» es un SSD, lo que complica si cabe más la operación. Normalmente se hace desde discos de igual o tamaño superior e igual construcción, pero se había planteado ponerle un SSD ya que ciertas operaciones se eternizaban (descomprimir un archivo zip de 15 Gbs se demoraba 5 horas >< ) y a parte le daría mas agilidad, a parte se aprovechó una oferta en Mediamark que por cuarenta euris se podría comprar un SSD de 250 Gbs.
El disco original tiene tres particiones, así que la única manera de que entre en el disco mas peque es reducir la ultima y mas grande partición. El HDClone 8 en su versión free no esta preparado para algo así, la estándar sí así que si compráis esa edición, este paso que vamos a hacer podéis saltarlo. Windows 7, el sistema instalado en esa máquina, tiene por defecto su reductor de tamaños de disco (está en Administrador de equipos/ Administrador de discos, y luego clic derecho en la partición a reducir). Ese paso le hice pero únicamente conseguía reducir 7 Gbs ^^; Seguramente borrando archivos grandes y optimizando el disco habría conseguido rebajar mucho el tamaño, pero opté por usar Gparted desde el boteable (había dos descompresiones de ese archivo gigante de 15 gbs pero es que la maquina requería más de media hora en borrarlos del todo (quizás más) y no disponía de excesivo tiempo). No empleé calculadora, solo hice una estimación para que quedara el disco por debajo del tamaño del SSD.
El proceso de reducción tomó cerca de 2 horas. Una vez echo, volví a arrancar el equipo para ver que Windows 7 iniciaba bien. Como era de esperar, saltó el chkdsk de inició antes de salir el escritorio, el de tres pasos. Lo dejé hacer, era primordial que lo hiciese para corregir defectos que quizás Gparted había generado con la reducción de tamaño. Este paso llevó cerca de 1 hora.
Cuando vi que Windows 7 había aceptado de buena gana la reducción de tamaño, era hora de apagar el equipo y encenderlo con el boteable de HDClone. Es importante iniciar el equipo con el disco duro de destino conectado a la máquina, así facilitar las detenciones del programa y que todo vaya bien.
Las opciones de clonado a elegir debemos siempre dejar al soft que ajuste todo automáticamente, no tratéis de hacerlo manualmente o cualquier pequeña cosa elegida afectará al resultado final, y sobre todo fijaros bien a la hora de elegir los discos de inicio y destino. Si todo va bien, el clonado empezará. En mi caso empezó sobre 35 Mbs/seg y acabo a 25 Mbs/seg, lo que le llevó casi 2 horas clonarlo del todo. Cuando haya concluido, el programa os preguntará que hacer con el MBR, igualmente pedir que lo ajuste automáticamente y en cuestión de segundos lo habrá dejado listo.
Una vez apagado el equipo, volver a encenderlo pero esta vez si con el disco clonado, y si todo va bien, el equipo iniciará correctamente y estará justamente donde horas antes lo habíais apagado con el disco duro viejito.
A tener en cuenta después del clonado
Hay varias comprobaciones y modificaciones a efectuar ya con el SSD funcionando, así que el trabajo no acaba ahí. Tenemos que verificar la alineación del disco, si el eliminado del TRIM esta activo y también hacer unos ajustes en el registro y en la BIOS.
La alineación es fundamental para que el SSD vaya fino y alcance la máxima eficacia, y verificar el TRIM para ver si Windows 7 lo está haciendo eficientemente.
El primero debemos de pulsar Windows + R y ejecutar msinfo32, ir a Componentes/Almacenamiento/Discos y buscar «Desplazamiento inicial de partición». El tamaño en bits que os aparezca debéis dividirlo entre 4096 y si no os sale decimales, es que está correcto. En mi caso fue así, si por alguna extraña razón no fuese el caso, haría falta un programa de alineación de discos, como Minitool partition Wizard o Paragon Alignment (el segundo está dentro del Hirens Boot en su edición 15 el que es más completo).
El segundo también es un comando, pero este debe ser ejecutado en CMD, así que de nuevo Windows + R y ejecutar cmd, ya allí copiar y pegar esta línea de comando:
fsutil behavior query disabledeletenotify
Si el valor devuelto es igual a 0, el TRIM está activo y podéis estar tranquilos. Windows 7 no nació para soportar SSD pero con el tiempo si lo hicieron, no obstante haced la comprobación para quedaros tranquilos.
Sobre las modificaciones, debemos modificar un valor en el registro Start, cambiarlo de 3 a 0. Volvemos a pulsar Windows + R y ejecutamos regedit y vamos a esta dirección:
HKEY_LOCAL_MACHINE \ System \ CurrentControlSet \ Services \ msahci
Echa la modificación, cerramos y reiniciamos, momento que aprovecharemos para acceder a la BIOS y modificar un parámetro que debe estar en IDE y cambiarla a AHCI – SATA.
En mi caso Windows 7 hizo los ajustes por si solo y la máquina respondió favorablemente el clonado, ese archivo de 15 Gbs que se demoraba 5 horas en descomprimir, ahora en 1 hora lo conseguía (aunque al día siguiente por razones que desconozco, el tiempo se prolongaba incluso más que con el disco duro antiguo ^^;) y borrar el archivo descomprimido pasaba de 30 minutos a solo 10.
A pesar de que Windows 7 se le ha preparado a posteriori para los SSD, he visto por la red que se puede hacer más ajustes, como deshabilitar la desfragmentación de disco o desactivar prefech. De momento me quedo con los más necesarios que son los que he mencionado ya que esta entrada en sí va centrada a ayudaros en la clonación y a lo más delicado del proceso, aún así tenedlos en cuenta si es Windows 7 lo que vais a clonar.
De nuevo os pido disculpas no ofreceros pantallazos de todo el proceso, si sucede una operación similar y se me permite hacer pantallazos, con gusto los haré y los incluiré en esta entrada.
Gracias por leer, un saludo^^