Siempre estamos enredado. Si bien takoyaki888 es un blog, para nosotros es mucho más que eso, y tratamos, en la medida en que vemos posible y necesario, plasmar el resultado de todos esos enredamientos en los que nos vamos metiendo.
Con ese concepto, con esa base, con esa idea, nos hemos embarcado en una nueva llamémosle aventura llamémosle experimento, de la mano de lo que es nuestro próximo nuevo lanzamiento de relato original, que hemos venido a bautizar como este planeta se llama.
Este nuevo relato nos pedía hacer algo que no habíamos echo antes, y era meternos en la piel de un escritor aficionado que busca la manera de publicar su obra, y en nuestro caso en concreto, ir más allá del alcance que normalmente tenemos con takoyaki888. No nos engañemos, no tenemos el carné de escritores aficionados o profesionales, no nos dedicamos tampoco a eso ni es nuestro objetivo, pero tenemos tablas suficientes para sentirnos que estamos fuera de cualquier categoría que se nos quiera encasillar y que podemos lograr todo cuanto nos proponemos.
No es prepotencia ni querer ser guays, para nada, simple y llanamente quiero dejar claro que estamos haciendo esto por una suma de muchos objetivos y motivos, no es ninguno en concreto y pueden ser todos a la vez. Es más, realmente hemos pasado muchos días de experimentos con unos quebraderos de cabeza totales hasta que hemos podido darle la forma que deseábamos, y eso también lo vamos a contar aquí, de como ha sido la experiencia completa que nos ha llevado a poder publicar este planeta se llama en Google Play Libros, que dicho así suena sencillo, pero ha sido todo un reto, que por supuesto, hemos disfrutado mogollón.
La génesis de proyecto, y de cómo hacer un epub es más difícil que explicar la cuadratura del círculo.
Lo primero que hicimos cuando el relato estaba desarrollado casi al completo, era ver los requerimientos de Google para poder publicar nuestra obra. Resumidamente, admiten dos formatos de archivo de texto, pdf y epub. Epub en ese momento no sonaba para nada fuera de otro mundo, quizás era algo como darle a “guardar como” y en ved de elegir docx, elegir epub. Pero no, para nada es tan fácil, es lo que pudimos ver con los primeros resultados que estuvimos obteniendo con nuestros primeros buceos por la red. Y desde entonces que aún estamos enfundados en nuestros trajes de neopreno.
Nuestra primera toma de contacto con epub lo logramos con un programa de Windows que con mucha sencillez permitía crearlos. Con el libro ya con nosotros, descargar una aplicación para móvil era el siguiente paso a dar. Gracias a esas dos herramientas comenzamos a familiarizarnos con este sistema que desconocíamos bastante, de echo tenerlo en formato libro digital nos ha ayudado a poder hacer correcciones a la obra.
El caso es que no estábamos del todo satisfechos con en el resultado obtenido con ese programa, entre otras cosas dejaba una marca de agua al final del libro, así que tocaba seguir buscando otras opciones, y fue entonces cuando se pasó Sigil por delante de nosotros. Sigil es un editor libre de epub con el que poder editar todo cuando quieras, y fue gracias a él que supimos ver cómo funcionaba en realidad el formato, básicamente los libros digitales son una pequeña web en formato xhtml potenciados en la actualidad por HTML5, lo que es al menos la ultima versión de todas, la epub 3.0.
Dijimos, esto en parte nos facilita mucho las cosas, pero volvía a abrir muchas incertidumbres. Pero no estaba ahí verdaderamente el gran problema de todo, porque para usar Sigil puedes surtirte de mucha información que hay por la red y lidiar con ello echando horas de prueba-error, el gran problema que nos estábamos encontrando es que no había ni una sola aplicación de libro electrónico que permitiera leer nuestro libro tal y como lo estábamos maquetando. Ninguno.
Exprimimos mucho a Sigil y los códigos necesarios para que todo quedara a la altura, pero era llevar la obra para verla en cualquier aplicación que íbamos descargando, y los resultados eran completamente un despropósito. No quedaba claro si en verdad era nuestra culpa que no teníamos las herramientas correctas o es que en verdad cada aplicación es un mundo. Fue entonces cuando tomamos una determinación: si era Google Play Libros la plataforma que habíamos elegido para publicar el libro, debíamos centrarnos en que quedara bien en sus herramientas.
A fuerza de echarle horas y horas, lográbamos que en la web se viera bien, y que en la aplicación para móvil no se desvirtuara mucho, pero seguía habiendo bastantes variaciones allí y aquí, y entre eso y que seguíamos con ánimos de aprender y esforzarnos más, no cesábamos en nuestro empeño por buscar nuevas formas y herramientas, y así fue como dimos con la última incorporación al plantel de software que hemos empleado, Pages de Apple.
Pages en verdad es mazo de amigable, para ser una aplicación por defecto de Ios y Osx está super bien, ha sido casi como trabajar editando un Word, así que el tiempo de aprendizaje se ha reducido bastante, pero igualmente aun con la solvencia que daba la versión de navegador de Google Play Libros, seguía habiendo elementos que descuadraban o salían mal maquetados. Realmente no sabemos muy bien que programas empleará la gente profesional y si la gente verá cumplidas sus expectativas con las herramientas con las que hemos tratado, pero es super harto complicado. Una cosa es abrir un documento de Word en diferentes versiones y ver que todo se descontrola, y otra muy distinta es que el mismo libro epub en cada aplicación se vea de una manera diferente. Que quebraderos de cabeza la verdad, visto lo visto nos cuesta demasiado recomendar una aplicación con la que se pueda leer bien libros digitales, solo podemos asegurar que ahora sabemos bastante más de cómo funciona los epub y que debemos hacer si volvemos a meternos en algo así.
«Caminante, no hay camino, se hace camino al andar«
Estos versos de Antonio Machado nos viene de perlas para explicar el nuevo apartado. Antes de elegir a Google Play Libros como el portal donde publicar el libro, ya habíamos tanteado que mínimos había que cumplir para poder lograrlo, pero esto no significaba que dejaran de aparecer pequeños «inconvenientes» a la hora de dar el paso definitivo.
Algunos de esos «inconvenientes» los vais a poder ver en los pantallazos que más abajo vamos a incluir. No vamos a incluir los dos pdfs que hemos guardado con las clausulas que hemos tenido que aceptar, pero básicamente, si quisiéramos hacer de esta aventura una fuente de ingresos con los que volvernos super ricos, Google se guarda un margen de 60 días para empezar a ingresar los beneficios y puede que no lo hagan si no llega a un mínimo que está establecido en 100 dólares. En sí, el proceso no ha sido un proceso digamos ultra difícil, leer con detenimiento cada uno de los apartados es primordial, y si había algo incomprensible o rellenado con deficiencia, siempre se puede regresar a ese punto y corregirlo, entre otras cosas porque el proceso de validación del epub (que no de la obra) puede llevar cerca de 24 horas después de haberlo «entregado».
Aquí tenéis la galería de algunos de los pasos que tuvimos que dar. No esperéis que estén todos, hemos puesto los más destacables y tapados los datos personales.
Después de todo esto, un problema muy grande surgió.
La importancia y la dificultad de demostrar que, lo que hemos creado, es nuestro
Como habréis podido observar, Google se guarda un tiempo prudente para hacer la revisión de la obra, alrededor de doce días. Echando la cuenta de la vieja, el último día sería aproximadamente el día catorce de abril. Bueno, que remedio, a esperar, pensábamos… Pero, días antes de llegar al límite, Google hizo esto:
A nosotros empezó a cundir un poco el pánico pues no entendíamos de primeras la razón de que nos hubieran desactivado la cuenta, así que rápidamente contactamos con ellos.
En cosa de dos días naturales nos respondieron, básicamente rechazaban a takoyaki888staff pues según ellos no contábamos con la autorización para ofrecer el contenido y nos daban la oportunidad de apelar esa decisión. Nosotros p0r supuesto hicimos las alegaciones, tres en total en el mismo correo, demostrando de palabra que nosotros éramos los que contábamos con todos esos derechos, pero que lo estábamos haciendo a través de un seudónimo. También alegamos que tampoco sabíamos si, aun llevando la obra al registro de la propiedad intelectual, aceptarían la resolución que dieran y que no esperaran que estando aún en pandemia, fuésemos a Madrid a hacer dicha gestión.
Varios días después nos contestaron en diferentes correos, con el mismo texto en inglés, más o menos lo siguiente:
«For completing the verification of your account we require any information that proves the ownership of the content uploaded by you under your name. We recommend you to provide us any of the following details:
A link to any reliable platform where the same content is available under your name.
A copyright document or any other document that you think can be considered as a proof.
Only after a complete assessment of the details we will be able to take an appropriate action on your account.»
Este mail nos dejó aún peor. La primera opción desde luego estaba fuera de nuestro alcance, y la segunda, ya teníamos un no implícito: En el mail anterior habíamos alegado una tercera razón, la obra contenía personajes de otras obras publicadas con anterioridad en nuestro blog y que somos dueños del blog desde hace más de diez años.
Nada de lo que teníamos les iba a servir ni nada de lo que les habíamos dicho les había servido, el sueño de ver publicada la obra se iba alejando por momentos… pero nunca nos damos por vencidos. Nos pusimos a recabar información en la web del registro de la propiedad intelectual, y encontramos se podía presentar la obra por correo ordinario, así que vimos que por ahí podíamos avanzar. No somos novatos en presentar obras en el registro, en 2014 ya habíamos solicitado un mismo reconocimiento para Suzume Red Mountain, solo que esta vez no tendríamos que ir en persona, así que contactamos por correo electrónico con ellos para que nos orientaran en el proceso.
Gracias a su rápida respuesta, el día doce de abril a las cinco de la tarde, un sobre acolchado con una carpeta de DVD que contenía un CD en su interior, y los modelos que nos pidieron cumplimentar, viajaba a la calle Santa Catalina número 6. De todo el proceso solamente pudimos obtener dos documentos: la factura del pago de la tasa necesaria para formalizar el registro de la obra que fueron 13,33 euros (4,44 euros menos que cuando Suzume Red Mountain) y el comprobante en pdf del correo certificado que la oficina de correos nos envió por mail.
Supuestamente ahora para nosotros, estábamos en manos del registro de la propiedad intelectual. Cuando hicimos el mismo procedimiento con Suzume Red Mountain hicieron falta dos meses para recibir el certificado del registro, así que… bueno, no podíamos hacer otra cosa más que esperar, ya no había más que pudiéramos hacer salvo contactar con Google Play Libros. Les comentamos que habíamos enviado la obra al registro de la propiedad intelectual, y para que vieran que era verdad, les enviamos el pdf con el comprobante del envío (previamente modificado pues aparecía mi firma), rogándoles además que no cerraran la incidencia pues en cuando obtuviéramos la resolución, se lo mandaríamos.
Al día siguiente de enviar el mail a Google Play Libros, nos respondieron que habían reactivado la cuenta. Casi nos da un ataque al corazón, ese texto tan feo rojo en verdad había desaparecido del panel de afiliados… pero el libro seguía sin ser publicado. Bueno, en sí era una excelente noticia, pero nos dejaba un super sabor agridulce, el libro seguía sin estar disponible. A esperar se ha dicho.
Hoy día catorce, había redactado unas líneas en una entrada que nada tiene que ver con esto, luego me puse a hacer cosas por aquí y por allí y pasadas unas horas de eso, volví a encender el equipo profesional. Entre las cosas que hice, fue entrar al panel de afiliados. Ahora si que iba a darme un infarto.
Esto claramente pedía un «pellízcame que creo estoy soñando», así que dicho y echo.
Nosotros que dábamos por echo que solo nos quedaba esperar y esperar y esperar, ahora de la noche a la mañana estaba publicado. ¿El comprobante del envío había sido suficiente prueba para demostrar que nosotros éramos de verdad?
Todo el proceso de Google nos ha llevado once días naturales y un gasto aproximado de unos 25€ entre la tasa, imprimir los impresos, el correo certificado y demás. Han sido unos once días muy emocionantes que se suman los días de estudiar como hacer el epub, que a su vez se suman a los meses que nos ha llevado redactar y repasar la obra. Todo el proceso completo ha sido una super experiencia super no os podéis hacer una idea. Pero para nada os podéis hacer una idea.
Somos los mejores \(^ 0 ^)/
Y a todo esto, ¿de qué va el libro?
Bueno, y después de todo el proceso, imagino os estaréis preguntándoos ¿de qué narices va el libro?
Ejem… No queráis tirarnos de la lengua y fastidiaros la experiencia, solamente esperamos que no sea un problema para vosotros poderos descargar la vista previa del libro, solo diremos que cada párrafo que contiene la obra es una joya en si misma (ahora nos crecerá la nariz muahahahahah). En serio, no es falta de modestia, el libro está super bien, os va a encantar.
Para aquellos que os de un poco reparo leer libros en smartphone, también pueden hacerlo desde el navegador web que frecuentemente empleéis, con lo cual aunque no seáis muy amigos de los servicios de Google, pensamos que de esta manera podemos dar servicio a una amplísimo número de usuarios. No obstante, estamos abiertos a cualquier duda, queja, comentario o sugerencia que nos queráis hacer, a parte tenemos un as debajo de la manga (no desvelaremos cual es), así que tenemos margen de maniobra para hacer algunas cosas chulis que tenemos en mente. Y hasta ahí podemos leer.
Seguramente cuando hayamos publicado esta entrada, veréis que dejaremos el libro muy visible y accesible para que podáis acceder a él con total facilidad. Vamos a estar expectantes de la recepción que tenga, y conforme veamos el entusiasmo que depositéis por la obra, ampliaremos ese «as en la manga» que he mencionado anteriormente.
Muchas gracias por leernos, espero que la entrada haya sido muy amena y entretenida. Nos seguimos viendo por aquí ya sea en una nueva entrad del blog, vídeo del canal o ambas cosas a la vez, que todo puede suceder. Cuidaros mucho y no hagáis demasiadas tonterias (esperaros al año que viene que seguro ya si se podrá -3-).